¡Eres hermoso!...Esto era lo que le gritaba una de las periodistas cuando vio entrar a Brad Pitt en la rueda de prensa que realizó este artista norteamericano en un reconocido complejo de cine de Berlín, en Alemania. Gritos de euforia, miles de flashes de cámaras y mujeres descontroladas por la presencia del artista conformaron los primeros minutos de Pitt en el recinto, que ataviado de gris y rosa, sonreía complacido por los gestos recibidos.
Una vez calmados los ánimos, el rubio actor comentó que se sentía muy contento de estar en tierras germanas, ya que allí está trabajando en un nuevo proyecto cinematográfico junto a Quentin Tarantino llamado “Inglorous Basterds”, el cual se desarrolla en la Alemania Nazi. También comentó que se quedará un tiempo en Berlín para dedicarse de lleno a sus estudios de arquitectura, ya que montará una oficina de arquitectos en la capital germana.
“Siempre quise estudiar esa carrera, pero las ocupaciones artísticas no me lo permitían (...) ahora quiero tomarme en serio este oficio y ser todo un profesional en la materia”, comentó emocionado.
Entre las interrogantes que se esperaba que respondiera con sinceridad, estaba lo de su divorcio de la actriz Jennifer Aniston, lo que hizo que su expresión se tornara seria de repente. Se tomó un respiro y agregó: “Por ser una pareja de cine, la gente nos catalogó como “la unión perfecta” y resulta que no funcionó (...) a veces no todo lo que brilla es oro y la falta de compatibilidad acaba con cualquier relación”.
En cuanto a su físico, al artista le asombra que lo cataloguen de hombre atractivo, ya que se considera una persona normal.
“Nunca me he considerado un hombre sexy, ni bello. Prefiero que la gente me vea como un actor, como un profesional que da lo mejor de sí ante las cámaras y que merece ser respetado por ello. Quiero estar a la altura de artistas como Dustin Hoffman o Robert de Niro y estoy trabajando duro para lograrlo”.
Según una investigación realizada el año pasado por la revista Vanity Fair, muchos de los hombres que se quieren realizar una operación estética, llevan la foto del rubio actor al cirujano plástico porque quieren parecerse a Pitt.
“Creo que esa gente necesita más un psiquiatra que a un cirujano plástico”, comentó Brad sonriente.
Miedo a envejecer
Las periodistas presentes en el encuentro con Pitt le preguntaron tantos aspectos de su vida íntima y personal, que el artista les increpó:
“¿Será que alguna de ustedes me va a interrogar por mis proyectos fílmicos y no por el nombre de mi perfume o si duermo en ropa interior?”
Incluso, una pícara periodista colombiana se atrevió a interrogarlo sobre su talla de zapato, a lo que Brad respondió inocentemente “42”, pero luego que le explicaran al oído el significado que esos números tienen en América Latina, el rubio actor se ruborizó y comenzó a reír a carcajadas. Poco después, una arriesgada comunicadora social le dijo que la gente lo valoraba más por su aspecto físico que por sus capacidades histriónicas, a lo que le preguntó: ¿Tiene miedo a envejecer?
Pitt la miró con seriedad y dijo: - “No voy a negar que me da terror envejecer. Tengo miedo de verme al espejo un día y ver que mi rostro esté lleno de arrugas, pero para allá vamos todos y eso es algo que no se puede controlar. Por eso quiero que me tomen en serio como actor, porque algún día esta cara no será la misma”.
El tema de su romance con Angelina Jolie fue el que más resaltó en este encuentro, los presentes le atribuían a la bella actriz la ruptura del matrimonio de Brad y Aniston, pero el actor solo se limitó a decir: “Angelina es una de las mujeres más inteligentes que he conocido en mi vida (...) es la primera vez que realmente me enamoro de alguien y ha sido de ella. No tengo más que decir al respecto”.
A pesar de haber actuado en infinidades de filmes, la crítica especializada no lo toma en serio como un intérprete de carácter. Sus roles en las películas “12 Monos” -por el cual estuvo nominado a un premio Oscar- y más recientemente, “El maravilloso caso de Benjamin Botton” en el cual demostró una vez más sus dotes como actor, no le han valido más que duras opiniones en los medios. Sobre ganar un premio de la academia, Brad comentó con ironía: “No es algo que me quita el sueño”- se queda en silencio unos segundos, suspira y finaliza: “Pero me gustaría obtenerlo algún día”.
José Luis Mata
2008
Autógrafo que me dio Brad Pitt durante la entrevista
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